MUCHA BULLA Y POCAS NUECES.
Se cumplieron los primeros cien días de gobierno de los mandatarios electos para el actual periodo constitucional, como es lógico llega la primera evaluación, donde los seguidores y contradictores sacan las primeras concusiones.
De esta evaluación hay que ser muy prudentes a la hora de exigir resultados concretos o tangibles, hay que entender que tiene prioridad la aprobación del plan de desarrollo, aun que esto no impide del todo el accionar del gobierno, hemos de entender que todo comienzo es difícil y no es fácil afinar el caminado, sin antes trastabillar.
Pero lo que no pueden evitar los actuales mandatarios, es la huella marcada que dejan sus acciones, los síntomas que se derivan de sus ejecuciones, en síntesis ya desnudan sus posturas y bien se pueden sacar las primeras conclusiones sobre lo que podría ser su gobierno.
Hablemos entonces del actual gobierno departamental, que ha generado muchas expectativas, se ha comprometido con mucho y no será fácil cumplirle a los araucanos, dadas las condiciones financieras del departamento, claro que estas promesas se hicieron con pleno conocimiento del recorte de regalías.
Cuanto quisiéramos muchos araucanos que el actual mandatario se meta en la cabeza que es ser un Gobernador, que dimensione los alcances de su investidura, que priorice cuales son los problemas fundamentales que más nos afectan, deberá primero atender tareas fundamentales como lo son el orden público, la salud, las finanzas, que requieren acciones inmediatas y no se ven iniciativas todavía. Parece que le importa poco el estado de los puentes de la carretera a la cabuya, el pésimo estado del puente del rio Tame en la vía a San Salvador, que lo podríamos perder definitivamente y que incomunica permanentemente al departamento con Bogotá.
Al actual mandatario departamental se le compara ya con gobernantes anteriores como el Doctor De Argermiro Méndez, que prefieren estar de animadores de parrando en parrando, en vez de concentrarse a gobernar; Sus acciones en los primeros cien días se pueden resumir, en la participación en varios parrandos, inauguraciones de obras del gobierno anterior y rifas de medio sueldo, estas rifas ya causan malestar entre sus colaboradores que tienen que aportar doscientos mil pesos de cada mesada mensual, para que el mandatario pueda cumplir con lo prometido.
Los emperadores romanos fueron famosos por manejar a su pueblo ofreciendo pan y circo, si el actual mandatario trata de emular este pésimo estilo del populismo que mucho daño le ha hecho al departamento de Arauca a través de su historia, y lo convierte en el eje central de su administración, se quedará muy corto en resultados, porque hasta hoy el gobierno solo muestra atracciones circenses, porque de pan o bienestar muy poco o nada.
El gobernador deberá entender que la campaña política ya pasó, que si quiere a un tiene tiempo para hacerle reingeniería su gobierno que lo haga con prontitud, que no olvide que el poder es exactamente como el que degusta un algodón rosado que venden en las fiestas de los pueblos, Más se demoran en echarlo a la boca y saborearlo, cuando este ya ha desaparecido.
Cayo Mario Sepúlveda Escobar cayin60@hotmail.com www.politicaaldia.tk
