viernes, 4 de junio de 2010

"SIMBIOSIS MUTUALISTA"


SIMBIOSIS MUTUALISTA

Estamos apunto de culminar el doble periodo presidencial del Doctor ALVARO URIBE VELEZ, un presidente que se ha ganado el reconocimiento de la mayoría de los colombianos en la lucha antisubversiva o mas exactamente contra las FARC, que le ha permitido la recuperación de espacios de movilidad y producción al país, además de demostrar una capacidad de trabajo impresionante o fuera de lo común, a tal punto de garantizar su asistencia a cualquier número de consejos comunitarios, algo difícil de repetir por otro mandatario; además de acudir con inmediatez a cualquier evento importante de alegría o dificultad dentro de la geografía nacional, se podría decir que es un hombre incansable, y con una capacidad casi sobrenatural en manejar e interpretar los tiempos y los espacios de la política, cuando lo requieren las grandes decisiones en nuestro país, en esto parece mago.

Pero de la misma manera los colombianos hemos encontrado cualquier clase de excesos en el ejercicio de su gobierno, no es fácil sustentar o negar el fenómeno paramilitar dentro de los partidos que lo han apoyada a tal punto de tener varia decenas de congresistas presos o investigados por recibir apoyo electoral de este grupo ilegal, el escándalo de las chuzadas en el DAS, un departamento administrativo que depende de la presidencia de la república, la Yidis política, El enfrentamiento con la Corte Suprema de Justicia.

El escándalo descomunal con los recursos de agroingreso seguro, el video de la entrada de Job al palacio presidencial por la puerta trasera, Los falsos positivos, Todas estas situaciones lo dejan muy mal parado ante la opinión pública internacional.

No relaciono la opinión pública nacional, quien admite toda esta clase de excesos en su gobierno, con tal que el presidente combata con éxito la subversión.
Se han encarnizado tanto en la guerra en estos dos antagonistas que para su existencia dependen el uno del otro. Así como lo dijo un exsecuestrado, Las FARC justifican su guerra por que existe Uribe y para Uribe mientras exista las FARC, cada vez que logre un éxito militar estará en la cresta de la ola en popularidad, en una coexistencia similar a los seres que generan una especie de relación biológica en donde ambos se benefician (simbiosis mutualista)

Para rematar la faena hoy vemos al presidente devaluando la majestuosidad de la figura presidencial, participando en política, parece jefe de debate del candidato Santos, como gallito de pelea opina sobre los conceptos emitidos por el candidato Mockus, adelantándose inclusive a la opinión de los otros candidatos.

El pésimo ejemplo dado por el presidente, solo invita a los ciudadanos a no ser respetuosos de la ley, o con que autoridad la procuraduría sea capaz de sancionar disciplinariamente a un funcionario público por hacer proselitismo político, o con que autoridad harán los congresistas amigos del presidente un debate político a otros funcionarios que hagan lo mismo, si el presidente a dado mal ejemplo.

Lamentable para el país, haberlo dividido entre colombianos buenos y malos. Buenos son los colombianos que apoyan al presidente y malos aquellos que son capaces dentro del respeto que merece la figura presidencial, de opinar diferente, o respaldar otra opciones, que no estén enmarcadas dentro de la cultura de la guerra.

Cualquier esfuerzo que se haga en no polarizar la sociedad bien recibido es, de mucho a de servirnos lo ocurrido con los partidos liberal y conservador como consecuencia de los odios mal fundados en la década de los años cincuenta, todos esos colombianos si hoy volvieran a vivir, estarían arrepentidos de lo que hicieron y mas viendo que sus partidos hoy están casi desaparecidos, gracias a ese buldócer de la política como lo es el presidente de la república.

Solo la historia juzgará para bien o para mal los acontecimientos que ocurren en esta época de la vida política Nacional, es obligatorio superar las diferencias entre colombianos, que a la postre no benefician a nadie.

Seguiremos esperando con optimismo moderado el momento en que las partes o los protagonistas de la guerra se acerquen y a través del dialogo nos brinden esa paz que tanto anhelamos los colombianos. Por lo pronto creo que mientras exista FARC y Uribe, habrá guerra para rato.

Cayo Mario Sepúlveda Escobar www.politicaaldia.tk cayin60@hotmail.com